Alarma en 44 minutos

Aprieta en el botón Agregar nuevo temporizador.

Pulsa en el botón Cuenta atrás.

En Horas, Minutos y Segundos, regula el tiempo que ha de pasar para que retumbe la alarma. En el caso que nos ocupa, introduciríamos 44 minutos.

En la categoría En cero, haz clic en la casilla Parar temporizador.

Decide cuál será el sonido que se escuchará, ya sea uno que venga de serie en la web o uno que almacenes en la memoria de tu ordenador, teléfono móvil o tablet.

Los sonidos que puedes encontrar son los siguientes (tienes la opción de probarlos marcando el botón ▷):

Para subir tu propio sonido o tu propia música, únicamente has de pulsar en el botón de los tres puntos (◦◦◦).

Por añadidura, no te olvides de que puedes pulsar en la opción Repetir sonido para que este se oiga de forma constante hasta que desconectes la alarma.

Si lo consideras oportuno, dale un título a tu alarma.

Después, presiona en Iniciar para establecer la alarma o en Probar para validar que funcione correctamente.

Entra al programa Reloj que trae el sistema operativo por defecto.

Escoge Temporizador o, en determinados casos, el distintivo del reloj de arena.

Desliza el dedo en el temporizador y selecciona 44 minutos.

De la misma forma, puedes configurar un temporizador establecido de antemano, o bien crear uno presionando en +. Tan sólo tendrás que definir un nombre para dicho temporizador, escoger el tiempo deseado y pulsar en Guardar.

Por último, pulsa en Iniciar.

Pulsa en la herramienta Reloj.

Elige la opción Temporizador (usualmente, se sitúa en la esquina inferior derecha de la pantalla).

Mueve las ruedas del reloj en horas, minutos y segundos hasta que emplaces 44 minutos para tu alarma.

Pulsa en Iniciar.

Ve al botón Inicio (logo de Windows) y busca la herramienta Alarmas y reloj en el inventario de programas o copia su nombre en la barra de búsqueda.

Aquí escoge la opción Temporizador y presiona en él.

Podrás acceder a la edición del temporizador, donde podrás transformar la hora, los minutos y los segundos. Si quieres, renueva el nombre del temporizador.

Pulsa en el botón Iniciar, localizado en la parte inferior derecha de la pantalla.

Observarás que hay tres distintivos justo debajo del temporizador. Empléalos si te resultan valiosos:

• Restablecer: sirve para que la cuenta atrás dé inicio nuevamente.
• Pausa: para el temporizador.
• Expandir: extiende la ventana del temporizador.

Ingresa a la app Reloj en tu Mac. Si no la encuentras en el Dock, puedes dar con ella en Spotlight o en la carpeta de Aplicaciones.

A continuación de que hayas abierto la app Reloj, haz clic en la pestaña Temporizador (Timer) situada en la parte superior de la ventana. Si no la hallas, de igual manera puedes acceder a ella a través del menú Visualización.

Fija la duración del temporizador escogiendo las horas, minutos y segundos apropiados. También puedes determinar el sonido que se reproducirá al terminar el temporizador.

Luego de que hayas programado el temporizador, presiona en Iniciar. El temporizador empezará a contar el tiempo y se detendrá automáticamente cuando llegue a cero.

Si necesitas detener provisionalmente el temporizador, toca en Pausar. Para retomar el temporizador, aprieta en Reanudar.

Si precisas volver a empezar el temporizador, toca en Listo. Esto te posibilitará personalizar el temporizador de nuevo desde el principio.

Por último, si recurres bastante el temporizador, puedes generar un atajo personalizado para entrar a él de inmediato desde la barra de menús u operando Siri. Para efectuarlo, ve a la categoría Atajos en Preferencias del Sistema y sigue las directrices para automatizar funciones.